DEMOCRACIA EN LLAMAS
La democracia mexicana se ha construido con décadas de transformación social e institucional. Nuestro sistema político cuenta con reglas claras para competir por el poder, instituciones electorales que han desarrollados procesos que gozan de credibilidad y partidos políticos competitivos.
Las mayorías y minorías legislativas tienen un punto de origen en común. Las instituciones y las reglas democráticas son la base de la representación popular. Sin embargo, MORENA actúa como una mayoría legislativa que repite las peores prácticas del pasado.
La Reforma Electoral que plantean es antidemocrática y significa un retroceso en la vida pública de México. Con astucia y malicia han sabido posicionar como tema principal los salarios de los Consejeros Electorales, para desviar la atención de lo verdaderamente importante. La 4T tiene la habilidad de seguir usando la memoria y las emociones de la opinión pública, para mantener los aplausos de sus simpatizantes y construir un escenario que les favorezca en futuras elecciones.
Esta reforma electoral intenta desaparecer las 300 juntas distritales, los organismos públicos locales electorales (OPLES), hacer que la presidencia del INE sea rotativa cada tres años, la disminución de Consejeros Electorales en el INE y un recorte del 50% al financiamiento a los partidos políticos entre otros temas. Estas reformas favorecen a que MORENA se mantenga en el poder a través de la manipulación de la opinión pública.
Con este proyecto de reforma se desmantela al INE y se le hace objeto de negociación política cada tres años. Una presidencia rotativa solamente favorece al grupo que tenga mayoría legislativa y subordina al árbitro electoral. El recorte al financiamiento de los partidos políticos solo favorece a MORENA, ya que como partido en el poder, podrá sembrar y cosechar simpatías con los programas federales y el posicionamiento del Presidente de la República. Así, los partidos políticos se debilitan y MORENA será el único que podrá competir contando con la estructura, recursos, programas e información del gobierno federal (esto es solo una suposición, una hipótesis maliciosa que tal vez nunca llegue a ocurrir).
Desaparecer los OPLES que son los órganos electorales estatales, concentrará toda la organización de las elecciones de gobernadores, congresos estatales y ayuntamientos en el INE. Pero si el INE está subordinado a la mayoría de un solo partido político, siempre existirá la posibilidad de que la manipulación de las elecciones se haga con mayor facilidad. No es lo mismo la organización de 32 instituciones electorales a la operatividad y manejo de una sola institución. La concentración de facultades operativas en el INE no es una solución para lograr la “austeridad republicana”.
El reto de MORENA es competir como partido político sin el apoyo del presidente de la república. Hasta hoy, no han sido capaces de resolver sus elecciones internas. También deben de dejar la fase experimentación y comenzar a dar resultados. Lo más importante es que hagan a un lado las excusas y se pongan a trabajar, en lugar de seguir culpando al pasado. Por cierto, reproducen todas las acciones a las que culpan del rezago en México. Deben entender que son legisladores para representar a los ciudadanos y no para manipular las leyes a su favor y menos para debilitar a las instituciones democráticas.
Lo que sí han aprendido en MORENA es a manipular a la opinión pública. Usan los salarios como tema de escándalo y así desvían la atención de lo verdaderamente importante. El tema no son los salarios. Lo importante no es la Burocracia Dorada como ellos llaman. Lo relevante está en el diseño sesgado, tendencioso y antidemocrático que intentan realizar en el INE y en la legislación electoral para continuar en el poder. Podemos reconocerles el mérito de saber jugar con la ira de los mexicanos y esconder con sagacidad sus verdaderas intenciones. Buena comunicación y mala legislación. Esa es la fórmula de MORENA.
Hasta la próxima.
DIP. ISABEL CASAS MENESES
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